Empresarios y emprendedores, comerciantes y soñadores. Todos, en algún momento, se hacen la misma pregunta. ¿Cómo llegaré a tener éxito con mi empresa? ¿Será una locura arriesgar tanto? ¿Y si fallo?
Estas son las típicas preguntas de nuevos emprendedores, y no tan nuevos. Todas las empresas pasan por estados muy variables, y para transitarlos deben siempre tener muy en claro cuál es su objetivo y cuáles los pasos a seguir para cumplirlo. Planificar, planificar y seguir planificando. Sin eso, conquistar el éxito se volverá tarea difícil.
Hoy, no solamente hay una gran oferta de productos y servicios, y una vasta variedad de marcas y empresas, sino que además todas comunican lo que ofrecen. Los consumidores están saturados de información y esto hace que las marcas entren en una homogeneidad difícil de separar.
La clave no es comunicar, sino tener una comunicación efectiva hacia el Público Objetivo. Saber cómo y cuándo comunicar. Elegir correctamente los mensajes y herramientas para proyectar la imagen con la que quiero ser percibido y detectar las oportunidades para ganar ventaja sobre los competidores y las debilidades para revertirlas.
Sin esa planificación se hace muy difícil destacarse en el sector. Los consumidores quieren ver lo que la empresa es, lo que proyecta, lo que hace y lo que dice. Quieren que le ofrezcas lo que buscan y que satisfagas sus necesidades. Pero cuidado! Los mensajes deben ser ciertos y estar perfectamente alineados a los objetivos y metas de la empresa. Sin eso, todo lo que hagas no vale nada. Los usuarios no quieren escuchar mentiras, quieren vivir verdades!
Todo lo que hagas traduce algo; todo transporta un mensaje al receptor que interpretará de acuerdo a su percepción del mundo, de acuerdo a los códigos y valores de la sociedad y de él mismo. Por eso, los mensajes y herramientas deben ser estudiados y planificados estratégicamente de acuerdo al Público al que se apunta.
Si las empresas quieren destacarse en el mercado por sobre sus competidores, es sumamente importante que se esmeren y desarrollen una comunicación planificada de sus productos o servicios, de su historia, de lo que ofrecen y de cómo lo ofrecen. Deben preocuparse en construir una imagen de empresa adecuada para lograr alcanzar el posicionamiento deseado. Una buena gestión de las comunicaciones facilita el éxito del trabajo, logra concretar nuevos clientes, tener clientes más felices, nuevos recomendadores de sus servicios y rumores positivos que harán que sus activos vayan en aumento.
Por eso, una buena gestión de las Comunicaciones con estrategias de crecimiento adecuadas hace que los resultados sean exitosos y que su empresa, sea del rubro que sea, camine hacia el éxito!
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